Historia de Marakame
¡Hola, soy yo, Mam'! Mis padres son de Egipto, pero nací y crecí en un crisol de culturas llamado Ginebra. Soy lo que llaman un niño de la tercera cultura. Definir mi identidad es complicado, especialmente cuando mi adolescencia me dio una pasión inesperada por el idioma español y las diversas culturas de América Latina. Sorprendentemente, con el tiempo llegué a dominar mejor el español que mi lengua materna, el árabe.
Mientras vivía en México y Colombia y exploraba varios países latinoamericanos, me encontré inmerso en el ambiente cautivador de los bulliciosos mercados callejeros. Fue allí, entre la bulliciosa multitud, donde descubrí una maravillosa conexión con los artesanos que elaboraban y vendían sus fascinantes creaciones. Estas personas talentosas se inspiraron en su rico patrimonio cultural y pusieron su corazón y alma en cada pieza que crearon. Después de regresar a Suiza de un viaje memorable a Colombia en 2018, no pude evitar sentir que me faltaba algo. Quería una pulsera de cuero que resumiera mis experiencias en el extranjero, algo único que me diferenciara. Desafortunadamente, a pesar de mis búsquedas en los mercados, ninguna de las pulseras captó mi atención de forma extraordinaria.
Entonces, ese mismo año, una inspiración me golpeó como un rayo. Me encontré con una imagen del pueblo masái, mostrando con orgullo pulseras de cuentas bordadas a mano que adornaban sus antebrazos y bíceps. Era el complemento extraordinario que llevaba buscando todo este tiempo, una pulsera de antebrazo con un diseño original. Decidido, cada vez que regresaba a Colombia y México, esperaba toparme con este esquivo accesorio, hasta finalmente aceptar que tal vez no existiera.
En enero de 2023 tomé la audaz decisión de tomarme un descanso de mi vida y embarcarme en una gran aventura: crear mis propios accesorios. Naturalmente, regresé a México, donde la comunidad wixárika lleva décadas perfeccionando el arte del tejido de chaquiras. México tiene un lugar especial en mi corazón, lo que lo convirtió en el punto de partida perfecto para mi viaje artístico. En un mercadillo (llamado tianguis en México) de Jalisco conocí a Alicia, de origen wixárika, y a su esposo Manuel, una pareja que trabaja juntos y vende las maravillosas obras de Alicia. Les confié mis diseños para tejer con cuentas Miyuki y el resultado fue exactamente lo que había imaginado. A continuación, diseñé pulseras de cuero que combiné con el trabajo de Alicia para crear un accesorio único: las pulseras Marakame Originals.
Pero mi viaje creativo no terminó ahí. En el camino, tuve el honor de cruzarme con artesanas excepcionalmente talentosas, creando conexiones profundas con cada una de ellas. Sus historias únicas y sus razones para crear joyas y accesorios originales resonaron profundamente en mí. Durante mi infancia y adolescencia, las mujeres de mi familia desempeñaron un papel vital en la persona que soy hoy. Su inquebrantable dedicación y el sinfín de lecciones que me impartieron han tenido un impacto inconmensurable en mi vida. Por lo tanto, me pareció natural dedicar mi aventura artística al apoyo y honor de las mujeres artesanas de los cuatro rincones del mundo.
La historia continúa en el blog con la elección del nombre Marakame.